El vaporizador facial emite vapor caliente que ayuda a abrir los poros, facilitando la limpieza profunda del rostro, la eliminación de impurezas y la absorción de tratamientos cosméticos. Además, mejora la circulación sanguínea, dejando la piel más suave, fresca y luminosa.
Beneficios principales:
- Hidratación profunda de la piel.
- Limpieza de poros, ayudando a eliminar puntos negros y exceso de grasa.
- Relajación y sensación de spa en casa.
- Mejora la eficacia de cremas y mascarillas faciales.
Uso recomendado:
- Llenar el recipiente con agua limpia (preferentemente destilada).
- Encender el aparato y esperar a que comience a producir vapor.
- Colocar el rostro a una distancia segura (20–30 cm).
- Utilizar de 8 a 12 minutos, de 1 a 2 veces por semana.